- Epifanía del Señor – Ciclo C. Domingo 05/enero/2025
- Mateo (2, 1-12). La visita de los magos
«Y entrando en la casa, vieron al Niño con su madre María, y postrándose le adoraron; y abriendo sus tesoros le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra».
En este primer domingo del año, celebramos la Epifanía del Señor. El evangelio de san Mateo, que leemos en este día, nos relata el episodio de los Magos de Oriente que vienen a adorar al rey que acababa de nacer. La Epifanía nos habla del encuentro entre Dios y la humanidad, con todas sus culturas y matices.
El evangelio pone en evidencia la dinámica de un camino de manifestación y de búsqueda; Dios se manifiesta a los magos de oriente a través de una estrella y ellos se ponen en camino siguiendo la luz que la estrella les trae. En búsqueda de la revelación que se ha manifestado, ellos emprenden un viaje que los lleva al encuentro, no solo de un rey temporal, sino del Dios que se muestra plenamente en la pequeñez de un niño acostado en un pesebre. Los magos abriendo sus cofres, y con ellos su corazón, se dejan transformar por esta sabiduría de Dios y dejan que su luz les ilumine el resto de sus vidas.
La Epifanía nos invita a hacer el mismo camino hacia ese Dios que se manifiesta constantemente en nuestras vidas. Esta búsqueda que brota de la fe, quiere dinamizarla, sacarnos de nuestra zona de confort a la que estamos muy acostumbrados… nos invita a buscar y descubrir la luz de Dios fuera de nuestros contextos habituales, a que nos dejemos sorprender por Dios que guía nuestro camino.
La solemnidad de la Epifanía del Señor nos invita a abrir nuestros cofres, es decir, nuestros corazones para dejarnos transformar por la luz de Dios, que es siempre nueva y a encontrarlo en las cosas sencillas, en la vida cotidiana… Al iniciar el año emprendamos juntos nuestro camino hacia la luz que Dios quiere ofrecernos y así poder iluminar la vida del mundo. Su Evangelio es la estrella que nos guía.
Por P. Carlos López, S.J.